sábado, julio 14, 2012

Conjuro




Descubrí que mi mujer era bruja cuando, por accidente, escuché una conversación telefónica con su mejor amiga: "Escribe su nombre en un papel con tinta roja, dóblalo simétricamente e introdúcelo en un vaso con agua; luego lo metes al congelador. En cuestión de días verás los resultados".
Pasaba el tiempo y no sabía cómo afrontar la realidad con mi esposa. Dispuesto a hablar con ella, me rodeó con sus brazos por el cuello y tiernamente comentó: Pronosticaron la entrada de un frente frío para hoy, deberías tomar tus precauciones al salir de casa.


Imagen: tomada de la red.

4 comentarios:

Pedro Sánchez Negreira dijo...

Buen micro, Lala, me has arrancado una sonrisa.

Un abrazo,

josé manuel ortiz soto dijo...

¿Cuántas brujas andarán por ahí y ni cuenta nos damos? Tal vez haya que escuchar conversaciones telefónicas.

Un abrazo.

LaLa dijo...

Gracias Pedro, por la visita y el comentario :)
Manolo, seguramente caminas junto a ellas todos los días.

Saludos

brenda dijo...

Este si esta genial laliya